Y YA NO ESTÁS
A Loly
Oranjetaad huele a arena fresca
a brisa de safari de
Lauren
y a huellas sin pies,
rumbos perdidos.
Tu pelo en las palmeras
mientras tu risa tiñe el cielo
de
gaviotas.
El verano
destella vida, hermana.
Otra vez el verano.
Y Oranjestaad
y arena fresca
y palmeras
y risas.
Otra vez el verano
sin
vos.
ESPERA
Me asomo al teléfono como
todas las noches.
Silencio en la línea.
Después de algunos
minutos-horas atendés.
Empezás a contarme de tus cosas,
Adrenalina pura, viento,
rostro quemado
por la nieve.
y los minutos pasan
llevándose consigo tu voz
que se me escapa.
Tu voz se pierde, te digo,
y un abismo ronco me
responde del otro lado.
Me quedo sola con el
auricular en la mano
y la Patagonia en la garganta.
MISTERIO
Las sombras avanzan sobre
la memoria.
Los recuerdos buscan
(su realidad, tu
inexistencia).
No pueden perderse.
No.
(porque el fantasma del
fuego, late)
como la vida en el surco.
AUSENCIA
Tus pasos decidieron no
andar,
aguardan otros.
Solos, no pueden.
Los míos van hacia vos.
Duele menos.
LUGARES I
Me quedo en cualquier
parte
porque no pertenezco a ningún lugar.
Estoy en mí.
II
En el centro exacto de la
mesa
el mate espera que alguna
de las doce mujeres
lo tome entre sus manos.
Beberá palo santo,
dolor
azucarado
y el sabor de la zafra
quedará en los labios.
DELFINA FLORES Y SU SOBRIA
Desde los ojos de
Delfina Flores,
Diego Rivera me observa.
Las trenzas
acunan la morena belleza
de Modesta.
Frida no está en el
cuadro,
y sin embargo,
su mirada,
en la de Delfina
aletea como la mañana.
SI UN DIA EL SOL SE APAGA
¿Si un día el sol se apaga
veré mi propia oscuridad?.
¿Podré con ella?.
¿O con gentil violencia
le imprimiré mi sello
cotidiano
hasta lograr sacar chispas
que transformen esta ceguera?
¿Si un día el sol se apaga,
seré capaz de generar
mi
propia lámpara?
Junto a aquellas primas
con arrugas
y algunos dientes menos
que ríen alocadas de
papelones trágicos,
anécdotas pasadas y dolores maduros,
llegan los tíos
muertos a compartir la rueda.
Ahora, las ausencias no
pesan. La mesa está completa.
Los recuerdos llenan la
casa y bebo la infancia en el té.
TIEMPO
Para cruzar la línea
entre aquel tiempo y éste
no basta con volar.
Porque duele el cielo, el
aire quema,
el infinito se achica
y la eternidad es hoy.
Julia Guzmán, (poemas inéditos, diciembre 2014)